El Picudo Rojo no es la única plaga que ataca la provincia, resulta que tenemos desde hace unos años un problema creciente con otro escarabajo: el barrenillo. Las víctimas en este caso no son las palmeras, sino los pinos piñoneros, que en el caso de esta provincia suponen casi toda la masa arbórea que conocemos en el sur.
Su nombre científico es tomicus destruens, y hasta donde he leído no queda muy claro si ha entrado en la península por la región de Murcia, o si tienen cierta naturaleza en este país, pues las dos noticias que he leído hasta el momento sobre el asunto se contradicen en ese punto. Parece que son un mal histórico menor (pues aparece en prensa antigua y estudios de la Junta en Andalucía, afectando de forma menor a otras especies de árboles), pero quizás no es el insecto sino su masificación y problema lo que vienen de Murcia, donde han notado con creces sus devastadores efectos con la pérdida de más de 850.000 pinos.
Su actuación tiene cierta similitud a la del Picudo: la hembra cava galerías en el inerior del pino mientras el macho retira al exterior el serrín y evita que la resina tapone la entrada. La hembra pone entre 25 y 45 huevos, en unas pequeñas celdas a ambos lados de la galería, y veinte días después salen las larvas, que se alimentan de los tejidos vivos del pino, rompiendo los vasos conductores de la savia y originando su muerte en unos 6 meses por los daños causados por las galerías. Las hojas comienzan rápidamente a amarillear y el pino se seca y muere sin poder hacer nada para evitarlo.
El remedio por ahora parece incluso peor que en la plaga que nos dejó sin nuestras palmeras, también antiguas y centenarias: cortar los pinos afectados y quemarlos. La diferencia es que aquí no hay tratamiento que se le pueda aplicar con garantía alguna, se trate en la fase que se trate, y la recomendación es cortarlos aún sanos, recién atacados, simplemente por cortar la expansión de la plaga.
Las zonas afectadas… Se habla de tierras pre-coto como Matalascañas y Mazagón y una presunta pasividad de las administraciones que restan importancia al asunto, achacándolo a la falta de lluvias. Otra zona afectada muy singular es la que corresponde a Cartaya y el inmenso pinar que la rodea.

Pinos afectados en Mazagón. Imagen: http://www.mazagonbeach.com
Al leer esta noticia pensé inmediatamente en que hace como un par de meses pasé por la carretera que va bordeando la playa desde La Bota hasta la unión de este tramo con la carretera de Punta Umbría y que, extrañado, observé la primera línea de pinos visibles con aspecto muerto o lo que entonces me pareció “quemado”. En aquel momento tuve cierta inquietud por ir al Ayuntamiento o algo para preguntar si eran conscientes de ello, y para saber de qué se trataba en tal caso. Finalmente, por diferentes motivos no lo hice, pero desde luego no pensé que pudiera tratarse de algo así sino de alguna quema aislada o algo similar. Y no digo que fuese el caso, pero al leer estas noticias he relacionado ambas cosas al instante, y por tanto, me da a pensar que esta plaga se encuentre ya también en todo el ecosistema de La Bota.
A diferencia de con el Picudo, espero que toda la tecnología y desarrollos químicos de los que el ser humano presume en este siglo XXI, no se deje doblegar por otro bichito y seamos capaces de hacer de estas noticias (que en el momento de publicarse no son un toque de atención, sino que ha alcanzando la calificación de «plaga» por parte de los medios) un problema menguante que acabe en anécdota. En caso diferente, y bien deseemos que no sea así, no me cabe duda que aún en tan desagradable catástrofe habría quien se alegraría y encontraría su justificación para construir sus hoteles en estos espacios, alegando ciertas parcelas suficientemente dañadas o deforestadas de pinos de manera “natural”.
Ahora toca esperar, y que esto se haga lo bastante mediático como para que los dirigentes tomen cartas en el asunto, que es la única manera de la que lo hacen: poniendo en boca de todos su imagen y prestigio; porque si en 2005 ya se hubiera venido hablando del Picudo (que es cuando comenzó el problema y además sólo teníamos que prestar un poco de atención a nuestro alrededor, pues en la provincia de Cádiz ya era toda una “celebridad”) las respuestas hubieran llegado antes. Aquí ya se habla de que el tal “barrenillo” lleva años haciendo estragos. Esperemos que estas palabras no lleguen tarde, porque como sabemos a través de las propias noticias publicadas, ya vamos tarde, y de momento las administraciones tardarán incluso más en llegar, pues por ahora poca relevancia dan al asunto.
D8ni.
Más información en:
http://www.mazagonbeach.com/2012/01/una-plaga-esta-infestando-y-destruyendo.html
http://articulos.infojardin.com/PLAGAS_Y_ENF/PLAGAS/barrenillos.htm