Señor Director: Ya hace años, muchos años, que llevo criticando y denunciando los desmanes, arbitrariedades, e injusticias cometidas por TODOS los políticos y sus partidos, contra toda la ciudadanía; ahora después de mucho tiempo, y por las circunstancias actuales, muchos se están dando cuenta, que el verdadero problema del ciudadano son esos políticos que decían representarnos y defendernos.
Políticos todos: nunca me habéis dado miedo, nunca os he respetado, JAMAS os he votado, no me habéis engañado, porque conozco desde siempre vuestra calaña, mis críticas y denuncias desde la falsa Transición son totalmente ciertas, Y EL TIEMPO ME HA DADO LA RAZON.
Ustedes sois el cáncer y la desgracia de la ciudadanía, esa ciudadanía que cándidamente confió en vosotros, y a la que habéis traicionado SIEMPRE.
Por vuestra ambición y codicia, habéis acordado acuerdos con banqueros, sindicatos, patronal, medios dirigidos, judicatura, y cómplices varios, para asentaros en vuestra poltrona, ganar mucho dinero y aprovecharse de vuestros cargos. Vuestro interés por el ciudadano solo ha sido para conseguir sus votos, y mantener los privilegios personales.
El mayor engaño de la Democracia, son vuestros sueldos de escándalo, duplicidades de cargos cobrando, corrupciones de todo tipo, enchufismos y compadreos para amigos y familiares, derroches, robo y malversación de las arcas públicas, pensiones vitalicias, y muchísimas Leyes injustas hechas por ustedes en perjuicio del pueblo.
Habéis consentido con premeditación y alevosía, que el rico y el poderoso lo fuera cada día mas, sin importaros el paro y empobrecimiento de una gran parte de la sociedad, que la banca, financieras y mundo empresarial engañara, estafara y arruinara a miles de honrados ciudadanos, generando miles de desahucios y dramas humanos, y que la ruina generada por vuestros amigos los ricos, y ustedes mismos, la tengan que pagar y sufrir ese mismo ciudadano que os vota y confía en ustedes.
Tampoco os importa, (con tal de no perder vuestros privilegios,) estallidos y conflictos sociales, que pudieran derivar en algo más grave y serio.
Por vuestra falta de ética, moralidad y honradez, este ciudadano os considera unos impresentables, y espero y deseo (PRIMERO QUE ME LEAIS), y que pronto se os termine el cuento y el engaño a todo un pueblo indignado y harto de vuestro sistema engañoso y corrupto.
Me despido con un cordial saludo, y espero que publiquen mi carta, agradeciéndolo de antemano.
Francisco Jiménez Urreta.